EL PALMERAL

El Palmeral de Orihuela es, junto al de Elche, el único bosque europeo de palmeras que puede considerarse autóctono desde un punto de vista histórico. Su origen musulmán y su ubicación entre la ciudad y la sierra de Orihuela ha favorecido, históricamente, la existencia de un considerable valor económico puesto de manifiesto a través de sus diferentes aprovechamientos agrícolas y artesanales.

ORIHUELA COSTA

Por su cercanía al mar y al estar inmerso en sectores muy urbanizados, Orihuela Costa se encuentra muy modificada e intervenida. Como resultado, las comunidades bióticas que actualmente ocupan la zona son propias de ambientes ruderales y antropizados...

LA SIERRA DE ESCALONA

El espacio natural de Sierra Escalona y Dehesa de Campoamor incluyen en su área de interés ecológico una superficie sensiblemente mayor de la que comprende el actual límite del LIC. Esta circunstancia resulta evidente, por ejemplo, al estudiar su vegetación y su flora.

LA SIERRA DE ORIHUELA

Con una superficie aproximada de 2.300 has., incluida la superficie en el término municipal de Santomera Murcia, la sierra de Orihuela está situada entre el límite meridional de las provincias de Alicante y el extremo oriental de Murcia.

EL RÍO SEGURA

El Alebo de los cartagineses, el Staber de los griegos, el Thader de los romanos o el Wad-al-abyad de los colonizadores árabes es, sin duda, el ingrediente natural de mayor trascendencia de cuantos componen el sustento económico, ecológico y social de este territorio peninsular que es la cuenca del Segura.

domingo, 25 de diciembre de 2011

El Ayuntamiento de Orihuela alega contra la sanción impuesta por la Confederación Hidrográfica del Segura



El Ayuntamiento de Orihuela ha alegado, a través de la Concejalía de Medio Ambiente, contra la sanción impuesta por la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) de 300.000 euros por vertidos a este río. Según ha explicado el concejal de Medio Ambiente, Manuel Culiáñez, ha señalado que, al ser notificada la sanción, se enviaron alegaciones porque, a su juicio, el ayuntamiento “no tiene responsabilidad” sobre estos vertidos.
Culiáñez ha explicado que el mantenimiento y la mejora de las depuradoras es competencia de una entidad pública que depende de la Generalitat Valenciana. De este modo, el Ayuntamiento de Orihuela sólo asume su mantenimiento, por lo que el concejal ha señalado que la institución local queda en “situación de indefensión”, ya que no puede acometer las mejoras que evitarían la imposición de estas sanciones.
También desde el consistorio se han aportado análisis técnicos que demuestran que los vertidos no afectan al dominio público hidráulico y se ha alegado que las muestras recogidas no son suficientes para determinar la contaminación de las aguas. Culiáñez ha recordado que la CHS puso una sanción de 100.000 euros que luego pasó a ser de 200.000 euros. Al sumar el coste de la reposición del dominio público hidráulico al que obliga la sanción, la multa asciende a 300.000 euros.
Santas Justa y Rufina
Asimismo, la Concejalía de Patrimonio ha enviado un informe a la Dirección General de Patrimonio en el que se informa de los desprendimientos de sillares y mortero que se produjeron el pasado 16 de diciembre en la iglesia de las Santas Justa y Rufina. Culiáñez ha detallado que se han detectado grietas en la fachada de las Gradas que “genera pérdida de sillares y mortero”, por lo que se valló la zona para impedir el paso de paso de peatones.
Además, el anidamiento de palomas en algunos huecos de la fachada y la mala impermeabilización de la parte alta de la fachada han contribuido al deterioro que ha finalizado en los desprendimientos. Así, el Ayuntamiento ha remitido el informe, al mismo tiempo que ha solicitado a la Dirección General de Patrimonio la redacción y ejecución del proyecto de consolidación de la parte alta de la fachada.
Consideramos que este edificio necesita una actuación urgente por tratarse de un Bien de Interés de Cultural (BIC)”, ha dicho el edil, quien ha deseado que la Consellería de Cultura incluya esta actuación entre los proyectos urgentes”.

viernes, 9 de diciembre de 2011

La Concejalías de Medio Ambiente y de Orihuela Costa protegerán las Dunas de la Glea y Cala Bosque


Las concejalías de Medio Ambiente y Orihuela Costa protegerán las dunas de la playa de La Glea (Campoamor) y Cala Bosque (La Zenia) tras obtener la autorización del Servicio Provincial de Costas. El edil de Medio Ambiente, Manuel Culiáñez, ha explicado que su concejalía trabaja desde el pasado mes de septiembre para obtener la autorización que permitirá el vallado de las dunas. “Por ahora, vamos a iniciar el vallado de lo que queda del sistema dunar de la playa de La Glea”, ha señalado.
En este sentido, ha destacado que la duna de esta playa de Campoamor ha sufrido un importante deterioro desde 2003, tanto por la instalación de infraestructuras junto a ella como por el tránsito de personas que van a la playa. De este modo, la superficie de la duna ha pasado de unos 3.000 metros cuadrados a unos 1.900. Con la intervención del Ayuntamiento, se protegerá a la duna, para que no disminuya de tamaño, y a la flora que en ella habita.
En el caso de Cala Bosque, la duna ha pasado de ocupar una superficie de 3.500 metros cuadrados a tener poco más de 2.000 metros cuadrados. Aunque el Servicio Provincial de Costas todavía no ha autorizado el vallado de esta duna, Culiáñez ha previsto que se conceda de forma inmediata, puesto que ya se ha obtenido el primer permiso para La Glea.
La primera intervención, la de La Glea, está en trámite de contratación, por lo que el concejal ha previsto que los trabajos comiencen en un plazo breve de tiempo. La intervención consistirá en el vallado en madera de la duna y la restauración vegetal de ésta. También se instalarán paneles informativos. Estos trabajos costarán unos 7.400 euros.
Por su parte, el concejal de Orihuela Costa, Robert Houliston, ha destacado que este proyecto es “importante simbólicamente”. “Hemos empezado a valorar los elementos mediambientales de la costa”, ha dicho, al tiempo que ha considerado que “es importante que los turistas y los residentes conozcan lo poco que queda de los sistemas naturales”. Del mismo modo, ha indicado que “los residentes y los turistas se darán cuenta de la importancia que le damos a la protección del medio ambiente en la costa”.